FUENTES DE ALIMENTACION
¿Qué es una fuente de alimentación?
Una fuente de alimentación
convierte la corriente alterna (AC) en una forma continua de
energía que los componentes del ordenador necesitan para funcionar,
llamada corriente continua (DC). A diferencia de algunos componentes
de Hardware cuyo uso no es obligatorio, como podría ser un disco SSD, la fuente
de alimentación es una pieza crucial porque, sin ella, el resto del hardware
interno no puede funcionar.
La fuente de alimentación es a
menudo abreviada como PSU y también se conoce como fuente de
poder. Las placas base, cajas y fuentes de alimentación vienen
en diferentes tamaños llamados “factores de forma”. Estos tres elementos deben
ser compatibles para que funcionen correctamente juntos.
Una fuente de alimentación en la caja
La fuente de alimentación está
montada en la parte trasera de la caja o chasis. Si sigues el cable
de alimentación del ordenador, ese que está conectado a la pared, verás que se
conecta a la parte posterior de la fuente de alimentación.
La parte trasera es la única
parte de la fuente de alimentación que la mayoría de la gente ve. También hay
una abertura del ventilador en la parte posterior de la misma que envía el aire
a la parte posterior de la carcasa del PC.
El lado de la fuente de alimentación
que mira hacia el exterior de la caja tiene un puerto macho de tres puntas en
el que se enchufa un cable de alimentación y la otra punta va
conectada directamente a la toma de corriente.
También incluye a menudo un
interruptor de encendido, y un interruptor de tensión de color rojo en fuentes
de muy, muy bajo nivel.
En el interior del PC, desde la
fuente se extiende una numerosa cantidad de cables. Los conectores situados en
los extremos opuestos de los cables se conectan a varios componentes dentro del
ordenador para suministrarles energía.
Algunos conectores están
diseñados específicamente para conectarlos a la placa base,
mientras que otros tienen conectores que se adaptan a discos duros, unidades
ópticas, tarjetas gráficas…
Las fuentes de alimentación están clasificadas por vatios para mostrar cuánta potencia pueden proporcionar al ordenador. Puesto que cada parte de la computadora requiere una cierta cantidad de energía para funcionar correctamente, es importante tener una fuente de alimentación (PSU) que pueda proporcionar la cantidad correcta.
Cómo funciona una fuente de alimentación
Si hay algún componente que
sea absolutamente vital para el funcionamiento de un ordenador, es la fuente de
alimentación. Sin esta, un ordenador es solo una caja inerte llena de plástico
y metal.
Las fuentes de alimentación
utilizan la tecnología de conmutación para convertir la
entrada de corriente alterna a voltajes de corriente continua más bajos. Los
voltajes más usados son:
- 3,3
voltios
- 5
voltios
- 12
voltios
Hoy en día, aproximadamente el
90% o 95% de la carga se sitúa en el raíl de 12V. Por eso, los otros raíles se
quedan en una posición cada vez más secundaria.
La potencia de una fuente de
alimentación aparece siempre en vatios. Un vatio es el producto de
la tensión en voltios y la corriente en amperios o amps.
En la actualidad, un ordenador se
enciende con un pequeño botón y se apaga con una opción de menú o con el propio
botón. Dichas opciones se integraron a la PSU estándar hace varios años.
De esta manera, el sistema
operativo es capaz de enviar una señal a la PSU con el objetivo de
indicarle que se apague. El pulsador envía una señal de 5 voltios a la fuente
de alimentación para indicarle cuándo encenderse. La fuente de alimentación
también tiene un circuito que suministra energía en stand-by, llamado 5VSB (5
volts stand by), incluso cuando está apagado el ordenador, de modo que los
dispositivos que permanezcan encendidos en standby puedan funcionar y la fuente
se pueda encender.
Antes de 1980 aproximadamente,
las fuentes de alimentación tendían a ser pesadas y voluminosas. Utilizaron
transformadores grandes y pesados y enormes condensadores para convertir el
voltaje de la línea a 120 voltios y 60 hertz en 5 voltios y 12 voltios DC.
Las fuentes de alimentación que
se utilizan en la actualidad son mucho más ligeras y pequeñas (Existen formatos
ATX, SFX y otras dimensiones). Transforman la corriente de 60 Hz (Hz, o ciclos
por segundo) a una frecuencia mucho más alta, lo que se traduce en más ciclos por
segundo. Esta conversión permite a un transformador pequeño y ligero en la
fuente de alimentación hacer la reducción de voltaje real de 115 voltios (o 230
en Europa y la mayor parte del mundo) a la tensión necesaria para dicho
componente en particular.
La corriente alterna de alta
frecuencia suministrada por una PSU es además más fácil de filtrar y rectificar
en comparación con la tensión de línea original de 60 Hz de CA, lo que reduce
las variaciones de tensión y el ruido para los componentes electrónicos
sensibles del ordenador.
Una fuente de alimentación
conmutada toma solo la energía que necesita de la línea de CA. Los voltajes y
corrientes típicos de una fuente de alimentación se indican en la etiqueta.
Estandarización de fuentes de alimentación.
Durante años, hubo por lo menos seis estándares de fuentes de
alimentación diferentes para PC’s. Hace unas décadas, la industria decidió
utilizar fuentes de alimentación basadas en ATX.
ATX es una especificación industrial, o sea, que la PSU tiene las características
físicas para adaptarse a una caja ATX estándar y las características eléctricas
para trabajar con una placa base ATX.
Los cables de alimentación del PC utilizan conectores normalizados y
diseñados de una forma que dificulta la conexión de los conectores incorrectos.
Además, los fabricantes de ventiladores a menudo utilizan los
mismos conectores que los cables de alimentación para las unidades de
disco o para periféricos (Molex), lo que permite a un ventilador obtener
fácilmente los 12 voltios que necesita.
La fuente de alimentación del ordenador es seguramente el componente con
más posibilidades de tener fallas, ya que entra en calor y después en frío con
cada uso, y recibe la primera corriente alterna de entrada cuando se enciende
el PC.
Un ventilador sin funcionar, continuos reinicios aleatorios del PC,
crasheos en carga e incluso problemas de rendimiento en juegos pueden ser
síntoma de una fuente de alimentación defectuosa, de baja calidad o
insuficiente. Debes tener en cuenta que los componentes de la fuente se
degradan con los años, y lo que hace 10 años era una fuente de 850W hoy podría
serlo de 650W, y su rendimiento también se puede ver afectado y poner en
peligro tus componentes.
Una fuente de alta calidad debería durar 10 años sin problemas. De todas
formas, te recomendamos que si vas a renovar tu equipo y la fuente tiene cerca
de 10 años, la cambies por una de calidad.
Para cualquier problema que sospeches que es culpa de la fuente de
alimentación, puedes o bien tramitar garantía, probar con otra unidad… Sin
embargo, lo que nunca debes hacer es abrirla para su reparación. Muchos no
estarán de acuerdo, pero con la complejidad de sus componentes
interiores, la anulación de la garantía que conlleva abrirla y la posibilidad
de sufrir descargas eléctricas incluso desconectadas deberían tenerse en
cuenta.
Es muy difícil que puedas reparar un fallo en una fuente sin tener su
esquema eléctrico y/o conocimientos avanzados de electrónica.
Mejoras en la fuente de alimentación
Hoy en día, han aparecido nuevos diseños internos en las fuentes de
alimentación, como la regulación de voltajes por VRM (módulos de regulación de
voltaje), los cuales son independientes. Son las fuentes DC-DC. Su principal
ventaja es que los voltajes no se disparan cuando la carga es desbalanceada,
situación que ocurre muy habitualmente en los PC actuales (recuerda la carga de
12V respecto al resto de raíles).
Diseños recientes en servidores web incluyen fuentes de alimentación que
ofrecen una fuente de repuesto que puede ser intercambiada mientras
la otra fuente de alimentación está en uso.
Algunos ordenadores nuevos, en particular los diseñados para su uso como
servidores, proporcionan PSU redundantes, o sea, existen dos o más PSU en el
ordenador, una de las cuales proporciona energía y la otra actúa como reserva.
La fuente de reserva toma el control inmediatamente en caso de
fallo por la fuente primaria. A continuación, la alimentación primaria se puede
cambiar mientras se utiliza la otra fuente de alimentación.
Pero las fuentes de alimentación ubicadas dentro de un PC no son las
únicas que existen. El otro tipo de fuente de alimentación es la externa.
Por ejemplo, algunas consolas de juegos tienen una fuente de alimentación
conectada al cable de alimentación que debe estar situado entre la consola y la
pared. En otros casos, la fuente de alimentación viene integrada en algunos
discos duros externos, que se requieren si el dispositivo no puede extraer
suficiente energía del ordenador a través de USB.
Las fuentes de alimentación externas son beneficiosas porque
permiten que el dispositivo sea más pequeño y atractivo. Sin embargo, algunos
de estos tipos de fuentes de alimentación son bastante grandes y su colocación podría
ser problemática.
Picos de corriente
Las fuentes de alimentación son a menudo víctimas de sobre tensiones y
picos de corriente, ya que es donde el dispositivo recibe energía eléctrica.
Por lo tanto, a menudo se recomienda enchufar el dispositivo en un SAI o en un
protector contra sobre tensiones con magneto térmico.
Potencia
La potencia nominal de la PSU suele ser la métrica más obvia para elegir
una fuente de alimentación. Si eliges una fuente de alimentación con muy poca
potencia, tu sistema se apagará cuando consuma más energía de la que puede
aportar la PSU. Por el contrario, comprar una tonelada de vatios podría ser un
desperdicio de dinero. Entonces, ¿qué es lo más conveniente?
La clave es crear un consumo de energía estimado para tu PC. Cada nuevo
componente cambiará la cantidad de vatios que tu sistema necesita para seguir
funcionando. En general, estamos avanzando hacia la eficiencia energética y las
nuevas CPU y GPU consumen cada vez menos.
Para estimar la demanda de vatios puedes usar la calculadora de
Outervision.com, que te permite seleccionar la marca y el modelo de la CPU y la
GPU, el almacenamiento y otros componentes. Si estás planeando realizar
overclock en tu sistema, también puedes configurar el reloj de la CPU, voltaje,
el reloj de la GPU y el de la tarjeta gráfica. De todas formas, suele ser más
conveniente recibir un asesoramiento experto que el de una calculadora.
Cuando hayas introducido todos los detalles que desees incluir, la
calculadora muestra tres números: potencia de carga, potencia de UPS
recomendada y potencia de PSU sugerida.
Para establecer un vataje que puedas encontrar fácilmente, haz un par de
cosas. Primero, redondea hacia arriba la potencia a la marca de 50 W más
cercana (370 W se redondearía hacia arriba hasta 400 W). Con este método, por
lo general puedes encontrar una fuente de alimentación que entregue una amplia
potencia, incluso si actualizas a algo más potente en el futuro.
Para algunos sistemas, es posible que no se justifique esa cantidad
adicional de 50 W o más. Las CPU bloqueadas (las CPU Intel sin la designación
“K” o “X”) son mucho menos propensas a ser usadas en situaciones en las que
consumen más potencia de la que requieren sus especificaciones. Además, estas
CPU tienden a disminuir su velocidad máxima de reloj cuando se
calientan, lo que ayuda a ahorrar energía también.
Cuando se trata de desbloquear las CPUs y el overclocking de la GPU, es
mejor tener mucha potencia. Esto puede ser útil cuando se quiere hacer un
overclock, o cuando se agregan componentes a un sistema de overclocking. El
overclocking a menudo requiere un mejor enfriamiento, y cada ventilador y bomba
de agua también consumirá vatios.
También vale la pena notar que tu sistema no siempre estará al máximo de
potencia. La mayoría de los PCs solo consumen 100 vatios o menos en reposo, y
rara vez más de 150W mientras realizas tareas cotidianas como trabajar en
documentos o navegar por la web. Pero tú quieres que la fuente de
alimentación maneje los requerimientos de potencia pico, no las cargas
típicas.
La electrónica nunca funciona al 100 por ciento de eficiencia en el mundo
real. La etiqueta “80 Plus” en una PSU denota que ha sido clasificada para un
cierto nivel de eficiencia. Antes de referirnos a la Certificación 80 Plus, hablemos de eficiencia.
Cuando una fuente de alimentación (u otro dispositivo) es 80 por ciento
eficiente, el 80 por ciento de la potencia nominal se entrega al sistema y el
otro 20 por ciento se pierde en forma de calor. Si una fuente de alimentación
está extrayendo 500 W de la pared y es 80 por ciento eficiente al 100 por
ciento de carga, solo podrá entregar 400 W a la salida máxima. Tal PSU
será clasificada a 400W, ya que es la potencia máxima que será entregada al
sistema.
Puesto que la potencia nominal de la PSU tiene en cuenta la eficiencia,
no hay muchas matemáticas que hacer. Eso es, a menos que te importen las
facturas de electricidad. Si te gusta mantener tu PC encendido todo el tiempo,
o si pasas largas horas jugando, una PSU más eficiente puede
hacerte ahorrar dinero.
Si la misma fuente de alimentación de 400 W es un 90 por ciento
eficiente, extraerá 444 W (en lugar de 500 W) de la pared para entregar
los 400 W a tu PC. Esa diferencia equivale a casi la misma energía que una
bombilla de 60 W. Y cuanto más se juega a juegos exigentes, más horas de
kilovatios comienzan a acumularse.
Es importante tener en cuenta que la eficiencia de la fuente de
alimentación no es lineal y cambia dependiendo de la carga. La especificación
80 Plus requiere que una fuente de alimentación sea al menos 80 por ciento
eficiente a 115V (en Estados Unidos) en todas las cargas del 20 por ciento o
más. Para las conexiones de 230V (UE), una fuente de alimentación PSU debe ser
82 por ciento eficiente al 20 y 100 por ciento de carga, y 85 por ciento
eficiente al 50 por ciento de carga.
La calidad de las piezas es otra gran razón para obtener una fuente de
alimentación más eficiente. Cuanto más eficiente es una PSU, menos calor
genera. Eso tiende a significar que los componentes duran más tiempo, y no
necesita usar tanto el ventilador de refrigeración. Aún así, esto no siempre se
cumple. Por ejemplo, piensa en una fuente 80 Plus Gold con condensadores de
baja calidad y un ventilador poco duradero, con disipadores absurdamente
pequeños, y en una 80 Plus Bronze con un ventilador puntero, generosa
disipación de calor y condensadores decentes. Sin duda, la Bronze es mejor.
Algunas fuentes de alimentación son lo suficientemente eficientes
como para no tener que conectar el ventilador todo el tiempo. Dependiendo
de tu caso, una fuente de alimentación menos eficiente tiene el potencial de
aumentar la temperatura ambiente en el interior de la caja.
Esto es evidente, pero una fuente de alimentación más eficiente también
es más ecológica. Un PC gaming de alta potencia bajo carga es un dispositivo
importante, al igual que una lavadora o una nevera. El consumo de menos energía
reduce la demanda de carga de toda la red, lo que puede ayudar a mantener los
picos fuera de línea, especialmente en tiempos de alta demanda.
Al comprar componentes para PC, a menudo encontrarás productos que no
parecen ofrecer ninguna diferencia importante en sus hojas de especificaciones
respectivas. Cuando esto sucede, puede ser útil ir con una marca que prefieres,
o mirar algo mucho menos atractivo que las especificaciones técnicas: la
garantía.
A día de hoy, una fuente con 2 años de garantía está atrasada en el
mercado y no debería ser considerada. Aunque varían, la mayoría de
las PSU vienen con tres o cinco años de garantía. Sin embargo, se
ofrecen siete y diez años de garantía con algunos productos. Esto no es un
indicador directo de calidad, pero sí una especie de seguro limitado digno de
considerar.
Después de la potencia y la eficiencia, la modularidad es uno de los
puntos de venta más importantes para las fuentes. En muchos casos, una fuente
de alimentación PSU modular es ideal. En otros, es lo último que quieres. ¿Pero
qué hace que una PSU sea modular?
En pocas palabras, una fuente de alimentación modular permite
conectar (o desconectar) los cables según sea necesario. Las fuentes de
alimentación tradicionales, por otra parte, tienen los cables permanentemente
conectados a la fuente de alimentación.
Las PSU semimodulares logran un equilibrio entre las dos: algunos cables
(generalmente la placa base y los cables de la CPU) están permanentemente
conectados, mientras que otros cables (PCIe, SATA y Molex) son desmontables.
Las PSU modulares tienen una gran ventaja cuando se trata de la
gestión de cables. La gestión de cables puede ser una de las tareas más
tediosas y costosas en la construcción de PCs. Una fuente de alimentación
modular permite utilizar únicamente los cables necesarios para montar un PC, lo
que puede reducir significativamente el desorden de cables en la caja.
Esto a veces puede mejorar el flujo de aire además de la estética.
La desventaja de tener cables desmontables es que los propios cables
generalmente usan conectores propietarios. Incluso los cables de diferentes
líneas de productos del mismo fabricante pueden ser incompatibles. Como tal,
siempre es aconsejable guardar los cables en una caja o bolsa para guardarlos
de forma segura para su posterior almacenamiento.
Las PSU modulares también ocupan más espacio en la caja que los modelos
no modulares. En las torres ATX, esto no suele ser un problema, pero puede
causar problemas reales en un sistema mini-ITX. Los conectores en el extremo de
los cables añaden aproximadamente 1/2-pulgada a 3/4 de pulgada a la longitud de
la PSU. Las PSU no modulares, por otro lado, no tienen conectores en el extremo
de la PSU, ya que los cables simplemente salen por la parte trasera de la
unidad.
En los casos en que el espacio libre en la parte trasera de la PSU pueda
ser muy estrecho, considera usar una fuente de alimentación no modular si la
construcción lo permite. Será más difícil guardar los cables sin usar, pero el
despeje será menos problemático. Si el espacio no es un problema, por lo
general se recomiendan las fuentes modulares o semi-modulares. Limpiará la
estructura y te permitirá reemplazar los cables cuando sea necesario.
El tamaño importa
Al igual que todo lo
demás que entra en una carcasa de PC, las dimensiones físicas de un PC pueden
tener un gran impacto. Mientras que esto se manifiesta generalmente con las PSU
de mayor potencia, incluso los modelos de bajo watios pueden ser demasiado
grandes en algunas versiones. Puede ser difícil conseguir una fuente PSU
EVGA de 1600W para encajar en una torre de media potencia, pero es mucho
más difícil conseguir una fuente PSU ATX en una caja mini ITX si las
cosas están apretadas.
Aunque hay algunas
cajas que soportan el factor de forma SFX más pequeño, muchas cajas
mini-ITX todavía están construidas para PSU ATX. Esta es una bendición mixta.
No hay una gran variedad de PSU SFX disponibles para el consumidor, por lo que
ir con ATX da más opciones. Incluso con esa elección, tienes que elegir las piezas
cuidadosamente. Las cajas ITX, por ejemplo, solo son capaces de aceptar fuentes
con una determinada configuración y tamaño. En tan poco espacio, tener una
fuente de alimentación modular es muy recomendable, pero extremadamente cara en
formato especial: SFX.
GILBERTO ALVAREZ GUTIERREZ.
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